Pues según parece, Dios viene en puntas de pié...bien quedo para NO asustarnos! Jesús no ha podido darnos mejor noticia ni pista para saber dónde acudir en busca de Dios: dentro nuestro.
A muchos les dá miedo mirarse por dentro no solo en busca de sí mismos, sino de Dios... y sin embargo lo digo por experiencia propia, en tiempos oscuros, en tiempos donde la vida es un terremoto q arrasa con todo lo nuestro, NO hay mayor consuelo que mirar por dentro y encontrarlo ahí... esperando que nos dignemos a dirigirle una palabra!! Y ante el primer gesto, Jesús ya se derrama por dentro y aunque TODO NOS DUELE, YA NADA ES IGUAL! El es el bálsamo, la fuerza, esa energía que nos mantiene vivos y ayuda a caminar hasta el fin del camino...
NO hace falta ir muy lejos, no.Con sólo cerrar los ojos y susurrar: DÓNDE ESTÁS? Él de inmediato responde: AQUÍ DENTRO TUYO.. TE ESTOY ESPERANDO...

CAIA

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