Cuando estudiaba en el seminario hice un trabajo sobre esta mujer a la cual Jesús perdona, algunos dicen que fue María Magdalena, pero... desde lo que yo pude investigar al armar el trabajo no habia seguridad, más allá de quien fuera esa mujer lo que más me conmovió y hace de este pasaje uno de mis preferidos fue la fe de ella. Ella derramó ese perfume equivalente a uno de esos que hoy en día son casi incomprables por el costo. Le dió lo que ninguno de los ricos que estaban allí le ofreció al Señor. Esto de derrumbar los prejuicios tontos que levanta el ser humano y que por lo visto Dios ni tiene en cuenta.
Hoy en día seguimos con estas conductas más allá de no ser fariseos. Además de la misericordia este párrafo es apasionante para tratar otros muchos temas que vivía esa sociedad y que hoy en día no ha cambiado demasiado.
Gracias por texto. Realmente no tengo más tiempo para seguir, pero me apasiona el tema.
Saluditos. Kume

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