Buscando la luz
Reflexiones creyentes


Inicio
Enviar artículo

Acerca de
Suscríbete al blog

Categorías
General [4] Sindicar categoría
Comentarios al Evangelio [747] Sindicar categoría
Reflexiones creyentes [42] Sindicar categoría
Testimonios [6] Sindicar categoría
Textos [8] Sindicar categoría

Archivos
Mayo 2010 [5]
Abril 2010 [5]
Marzo 2010 [7]
Febrero 2010 [6]
Enero 2010 [16]
Diciembre 2009 [22]
Noviembre 2009 [19]
Octubre 2009 [19]
Septiembre 2009 [6]
Agosto 2009 [8]
Julio 2009 [4]
Junio 2009 [15]
Mayo 2009 [20]
Abril 2009 [25]
Marzo 2009 [24]
Febrero 2009 [22]
Enero 2009 [24]
Diciembre 2008 [27]
Noviembre 2008 [24]
Octubre 2008 [26]
Septiembre 2008 [17]
Agosto 2008 [24]
Julio 2008 [23]
Junio 2008 [30]
Mayo 2008 [30]
Abril 2008 [30]
Marzo 2008 [31]
Febrero 2008 [29]
Enero 2008 [31]
Diciembre 2007 [31]
Noviembre 2007 [29]
Octubre 2007 [31]
Septiembre 2007 [25]
Agosto 2007 [20]
Julio 2007 [30]
Junio 2007 [31]
Mayo 2007 [29]
Abril 2007 [12]

Sindicación (RSS)
Artículos
Comentarios

 


11 de Septiembre, 2007


Es bueno consultar

 

(Lc 6, 12-19) En aquellos días, Jesús se fue al monte a orar, y se pasó la noche en la oración de Dios. Cuando se hizo de día, llamó a sus discípulos, y eligió doce de entre ellos, a los que llamó también apóstoles. A Simón, a quien llamó Pedro, y a su hermano Andrés; a Santiago y Juan, a Felipe y Bartolomé, a Mateo y Tomás, a Santiago de Alfeo y Simón, llamado Zelotes; a Judas de Santiago, y a Judas Iscariote, que llegó a ser un traidor.

Bajando con ellos se detuvo en un paraje llano; había una gran multitud de discípulos suyos y gran muchedumbre del pueblo, de toda Judea, de Jerusalén y de la región costera de Tiro y Sidón, que habían venido para oírle y ser curados de sus enfermedades. Y los que eran molestados por espíritus inmundos quedaban curados. Toda la gente procuraba tocarle, porque salía de él una fuerza que sanaba a todos.

 

 

Ya lo sabíamos. No solo dedica tiempos largos a estar con su Padre, sino que las decisiones importantes toma asesoramiento con el mismo. En este caso antes de elegir a sus discípulos se pasa la noche consultando con su Padre. Porque la oración también es esto: consultar. Y escuchar en silencio, en ese silencio elocuente que habla dentro de nosotros mismos. Es pedir, agradecer, escuchar; es un montón de cosas más, pero también es consultar. Al fin de cuentas, buscaba hacer la voluntad de su Padre.

 

Dos gustos del Nazareno: estar a solas con su Padre y estar con la muchedumbre. Vivir la soledad y la compañía, el silencio y el tumulto, el estar a solas y el rodearse de gente. Ambas cosas son compatibles. Y casi diríamos que hasta necesarios. Los psicólogos hoy, con distintas palabras, lo recomiendan como métodos contra el estrés.

 

Dos lecciones en el día de hoy: recordarnos que también hemos de alejarnos de vez en cuando, subir al cerro y estar solos. Y lo segundo no quedarnos allá, sino bajar de la montaña, salir del silencio, y volver donde la multitud para hacer el bien. Ambas cosas son importantes, la una no puede caminar sin la otra. Lo que ocurre es que a veces tenemos el peligro de querer empezar por el final, pero no podemos olvidar que si no tenemos no podemos dar, y es necesario estar llenos de bondad para hacer el bien, y el depósito no suele llenarse solo entre y con la multitud.

 

 

Por María Consuelo Mas y Armando Quintana - 11 de Septiembre, 2007, 19:49, Categoría: Comentarios al Evangelio
Enlace Permanente | Referencias (0)




<<   Septiembre 2007  >>
LMMiJVSD
          1 2
3 4 5 6 7 8 9
10 11 12 13 14 15 16
17 18 19 20 21 22 23
24 25 26 27 28 29 30

Enlaces
eGrupos
ZoomBlog

Otros blogs
Para ser diferentes
Pequeñas semillitas
Restauración de lo alto
Testigos del Evangelio

 

Blog alojado en ZoomBlog.com