Buscando la luz
Reflexiones creyentes


Inicio
Enviar artículo

Acerca de
Suscríbete al blog

Categorías
General [4] Sindicar categoría
Comentarios al Evangelio [747] Sindicar categoría
Reflexiones creyentes [42] Sindicar categoría
Testimonios [6] Sindicar categoría
Textos [8] Sindicar categoría

Archivos
Mayo 2010 [5]
Abril 2010 [5]
Marzo 2010 [7]
Febrero 2010 [6]
Enero 2010 [16]
Diciembre 2009 [22]
Noviembre 2009 [19]
Octubre 2009 [19]
Septiembre 2009 [6]
Agosto 2009 [8]
Julio 2009 [4]
Junio 2009 [15]
Mayo 2009 [20]
Abril 2009 [25]
Marzo 2009 [24]
Febrero 2009 [22]
Enero 2009 [24]
Diciembre 2008 [27]
Noviembre 2008 [24]
Octubre 2008 [26]
Septiembre 2008 [17]
Agosto 2008 [24]
Julio 2008 [23]
Junio 2008 [30]
Mayo 2008 [30]
Abril 2008 [30]
Marzo 2008 [31]
Febrero 2008 [29]
Enero 2008 [31]
Diciembre 2007 [31]
Noviembre 2007 [29]
Octubre 2007 [31]
Septiembre 2007 [25]
Agosto 2007 [20]
Julio 2007 [30]
Junio 2007 [31]
Mayo 2007 [29]
Abril 2007 [12]

Sindicación (RSS)
Artículos
Comentarios

 


En esto conocerán que son mis discípulos

Jn 13,31-33a.34-35:  Cuando salió Judas del cenáculo, dijo Jesús: «Ahora es glorificado el Hijo del Hombre y Dios es glorificado en Él. Si Dios es glorificado en Él, también Dios lo glorificará en sí mismo: pronto lo glorificará.

»Hijos míos, me queda poco de estar con vosotros. Os doy un mandamiento nuevo: que os améis unos a otros como yo os he amado. La señal por la que conocerán que sois discípulos míos, será que os amáis unos a otros».

 

 

 

Así de pequeñito, con tan poquito texto, es el Evangelio de hoy. Pero nunca mejor dicho aquello de que lo que importa es la calidad, no la cantidad. Porque densidad y contenido no le falta al mensaje de hoy. Un anuncio: Jesús es glorificado. Un compromiso: amarse los unos a los otros como yo les he amado.

 

Y, por si hubiera duda, ¿cómo conocerán que somos cristianos?. Porque nos amamos.

 

Les llama “hijos”; en alguna traducción se lee “hijitos”. Les recuerda que le queda poco tiempo. Y antes de irse, les dice lo esencial: el amor a los demás.

 

A partir de ahora si queremos buscarle y encontrarle, será en el amor a los demás, en la fraternidad que impulsemos, en la justicia que construyamos, en la libertad que defendamos, en la igualdad entre todos que realicemos. Porque “obras son amores, y no buenas razones”, y como a andar se demuestra andando, a amar se nota por sus efectos: justicia, misericordia, igualdad, y cosas similares.

 

Un mensaje ya viejo, ya conocido. Pero que, hoy más que nunca, habría que decir que no está de moda en nuestra sociedad. Cada uno va a lo suyo. En la familia, en el trabajo, en los barrios, y ahora, los que estamos en períodos electorales, también en la política. Cada partido a lo suyo. Nadie construye con los otros. Ahora se pelean y después se ponen de acuerdo para repartirse el poder. Nada que ver con esto de “como Yo les he amado”. Es decir, poniéndose al servicio de los otros, lavándoles los pies a los demás.

 

También nosotros nos hemos acostumbrado. Corremos el peligro de escuchar este mensaje, como múltiples canciones que nos gustan y las ponemos en altavoz para deleitarnos, no cayendo en la cuenta si su mensaje es positivo o negativo para nuestras vidas.

 

“Como Yo les he amado”, “como a ustedes mismos”. Son las dos medidas del amor que nos ha dado en su Evangelio. Habrá que recordarlo siempre, aunque la sociedad vaya por otros caminos.

 

 

 

 

Por María Consuelo Mas y Armando Quintana - 6 de Mayo, 2007, 10:37, Categoría: Comentarios al Evangelio
Enlace Permanente | Referencias (0)




<<   Mayo 2007  >>
LMMiJVSD
  1 2 3 4 5 6
7 8 9 10 11 12 13
14 15 16 17 18 19 20
21 22 23 24 25 26 27
28 29 30 31    

Enlaces
eGrupos
ZoomBlog

Otros blogs
Para ser diferentes
Pequeñas semillitas
Restauración de lo alto
Testigos del Evangelio

 

Blog alojado en ZoomBlog.com